Cobardía

Esta semana he hecho uno de los mayores actos de valentía en lo que llevo de vida, que todo hay que decirlo, no es mucho.
Tres años es lo que me ha costado decidirme a dar el paso, y no puedo sentir otra cosa que no sea alegría y liberación.
Siempre has pretendido ser una persona que no teme a nada, que te enfrentas a todo cuanto pasa con audacia pero, ahora mismo, lo único que pienso de ti es que eres un cobarde.
Te conté lo que llevaba sintiendo durante todo este tiempo y no has sido capaz de decirme nada, incluso una grosería hubiera sido más significativa que tu silencio.
No fue fácil para mí decirtelo, me lo tomé con humor y llegué hasta el final pero has despreciado cada una de mis palabras. Sé que enterarte de una cosa así no es algo habitual pero ni siquiera te estaba comprometiendo a hacer nada con lo que te conté, solamente quería que lo supieras.. más por mi bien que por el tuyo.
Pensaba que eras la persona a la que yo siempre defendía, la que me demostraste con hechos que eras, pero con esto sólo has conseguido que crea que eres la persona que todo el mundo me decía. Y créeme, si yo fuera tú, no querría serlo.
Espero que encuentres tu camino en la vida, al igual que yo ahora tengo que seguir con el mío, pero sinceramente espero que no nos volvamos a juntar porque perder de nuevo mi rumbo, sería un desastre.